El mejor lugar del mundo es aquí mismo

Este libro tiene como protagonista a Iris, una mujer que ronda la cuarentena. Tras la trágica muerte de sus padres en un accidente de tráfico Iris se siente muy sola, nunca ha tenido pareja aunque tampoco es que le importara mucho hasta ese momento. La única compañía que tiene es la de todos los recuerdos. Iris decide suicidarse, aunque justo en el momento en el que va a saltar hacia las vías del tren un niño pequeño que jugaba con una pelota la interrumpe y ella se echa para atrás. Para tranquilizarse decide entrar en un café que nunca antes había visto por el barrio. Tiene un letrero luminoso que anuncia el nombre “El mejor lugar del mundo es aquí mismo”. Ese café no es uno cualquiera, cada una de las mesas tiene propiedades mágicas (la mesa del perdón, la mesa de la esperanza, la mesa de los recuerdos...), es allí donde conoce a Luca y con quien se reunirá durante 6 tardes consecutivas en ese café. Iris se enamorará de él aunque sea un tanto misterioso, ya que parece saber demasiado sobre la vida. Durante esas tardes de conversaciones con Luca, Iris recuperará la ilusión para hacer realidad sus sueños y entenderá la magia de la vida. Una tarde, Luca desaparece sin dejar rastro. No ha aparecido a su cita tan usual en el café con Iris. Ella va en su busca y es entonces cuando se llevará una gran sorpresa. Mentras tanto se reencuentra con un amor de la adolescencia con el cual comenzará una relación especial. Su vida comienza a cambiar y se da cuenta de que gracias a ese niño que jugaba con un balón ella está descubriendo las cosas que ofrece la vida...

Es una historia de ilusión por conocer, por crecer e intentar rehacer una vida que parecía rota y llena de soledad.

Rosana Esquinas López (2º Bach C. 2013)