Mostrando entradas con la etiqueta Cátedra. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cátedra. Mostrar todas las entradas

lunes, 30 de enero de 2023

El abuelo

 


Esta novela, la cual se divide mediante escenas, está llena de diálogos.

Todo empieza con don Rodrigo, conde de Albrit, que viajó a Perú debido a un presentimiento que él tuvo desde el fallecimiento de sus padres, que sus antepasados les habían dejado oro escondido por aquellas tierras, en aquel momento conocidas como las Américas.

Don Rodrigo decide volver, claramente con las manos vacías, y nada más llegar a su caserío ubicado en Jerusa, España, decide ir a ver a su nuera viuda Lucrecia, que vive junto a sus dos preciosas hijas, Dolly y Nell. Desde el primer día del fallecimiento del que era su hijo, Rafael, don Rodrigo acusa a Lucrecia de matar a su hijo de tristeza, aburrimiento, monotonía y engaño. Esta última acusación viene debido a que Lucrecia ha tenido una hija con otro hombre tras la muerte de su marido e hijo del Conde, y don Rodrigo sigue pensando que esa aventura con el hombre que Lucrecia tuvo la hija, viene de mucho tiempo atrás cuando su hijo Rafael estaba vivo, siendo esta una de las razones por las que don Rodrigo piensa que fue su motivo de muerte.

Una vez que el Conde don Rodrigo visita a Lucrecia, cae en que tiene una sola nieta legítima, ya que es su única descendencia. Y aquí es donde se podría considerar que empieza el nudo de esta novela.

Después de esto, el abuelo va interesándose en crear una relación con los que más frecuentaban la compañía de la familia, como el educador de Dolly y Nell, Coronado, al que trata de sacarle las diferencias entre las dos niñas, pero afirma que son igual de buenas chicas al igual que trabajadoras. Don Rodrigo, hablando con las niñas descubre que Nell quisiera llegar algún día a ser pintora, y que Lucrecia engañó a Rafael con un pintor, por lo que deduce que Dolly es su verdadera nieta.

Lucrecia viendo el panorama mete a traición al abuelo en un convento, donde se hace fiel amigo de Coronado, que quería suicidarse, pero no tenía valor.  Lucrecia confesó al abuelo que Nell era su verdadera nieta a través del cura Maroto, pero fue Dolly la que mantuvo una relación de lo más cercana con su “abuelo”, por eso cuando Lucrecia quiso llevárselas a ella y a su hermana a Madrid, ella lo rechazó y pilló a su abuelo y a Coronado a punto de suicidarse juntos impidiendo la acción con su llegada, y siendo criada finalmente por ambos. 

 

Puedo decir que es de las novelas más gustosas que he leído, donde se mezcla el adulterio, la ambición y el cariño antes que el dinero. Al principio no entendía la actitud de Lucrecia, pero al fin y al cabo el amor es el amor. El abuelo me sorprendió su desarrollo a lo largo del libro ya que al principio simplemente buscaba a quién darle su herencia, pero al final de la novela, dándole igual quién fuera su verdadera nieta, acabó brindando todo su amor, cariño y herencia, junto a Coronado, a la que más cariño y paz le proporcionó. Cien por cien recomendada.

 

Elena Hernández Martínez (2023)

martes, 18 de enero de 2022

Yerma


La obra Yerma, de Federico García Lorca, trata de una mujer casada con Juan. Ella desea ser madre, pero se le está haciendo imposible ya que no se queda embarazada. Ella ve cómo su amiga María, que lleva tan solo cinco meses casada, ya está embarazada y ella ya dos años aún no se ha quedado. Ella busca tener una vida completa y piensa que le falta tener un hijo para tenerla. 

Un día, Yerma fue a llevar la comida a su marido y de vuelta se cruza con una anciana que le dice si alguna vez ha sentido que temblaba con su marido y ella dice que solo lo ha sentido con Víctor, cuando la cogió en brazos para saltar a una acequia. Ella cada vez se siente mucho más frustrada, y su marido Juan no quiere que salga de su casa porque la gente empieza a hablar, ya que se ve a Yerma siempre sola y hablando de vez en cuando con Víctor, pero ella asegura que aunque le guste otra persona siempre va a ser una mujer honrada. Juan por todo eso decide llevar a las dos hermanas a su casa, las cuales antes cuidaban la iglesia y ahora cuidarán de ella para que no se sienta tan sola.

Yerma acude a la casa de Dolores una conjuradora. Ella explica que le da unas oraciones que si recita bien muchas mujeres se quedaron embarazadas, pero Juan irrumpe en la casa y se cabrea con ella porque desde que se casó con ella lleva haciendo cosas mal.

Yerma cada vez piensa más en Víctor ya que siempre lo ha visto tan feliz y siempre se ha sentido tan atraída. Ya ella tan desesperada acude cerca de una ermita. Hay una especie de cabaña hecha con mantas y allí acuden mujeres que quieren quedarse embarazadas y no pueden. Cuando entran se encuentra a mujeres descalzas corriendo con cirios en la mano, ya cuando empieza a anochecer recitan oraciones y ya entran a la iglesia. Allí dentro ven a una con una máscara de macho y a otra con una de hembra, que recitan unos versos, como una danza de la fertilidad. Allí una anciana le dice que la culpa es de su marido que su casta es mala, pero Yerma le defiende y dice que sí que lo es, aun así la anciana le recomienda que se vaya con su hijo, todo eso lo escucha Juan y él empieza a quejarse y dice que muchas mujeres son felices sin tener hijos, ella ya harta de todo agarra a su marido por el cuello y aprieta hasta matarlo.

 Ella aclara que ahora ya no se sentirá tan mal y vivirá tranquila, aunque sea marchita.

 

Mi opinión sobre este libro es que me ha parecido bastante entretenido, pero lo que me ha faltado es saber qué pasaría después con Yerma, si se reencontrará con Víctor o con el hijo de la anciana.

Aun así, me ha gustado mucho. Entiendo el punto de Yerma de querer ser madre en esa época y no poder, pero dentro de lo que cabe me ha gustado cómo al final apoyaba Juan a su mujer e intentaba que ella se quedara en paz, pero ella con todo su odio ya va y lo mata. Yo hubiera puesto un acto más para terminar de entender el punto de ella si se arrepiente o no, qué piensa la gente y ver cómo termina todo. 

También, me ha gustado el apoyo de María, la amiga de Yerma, o la ayuda que le da la anciana y Dolores, y ya por último me ha gustado ver cómo Yerma sentía que su corazón era de Víctor, pero su cabeza de Juan.

 

Ángela Hernández Cascales (2022)

jueves, 4 de septiembre de 2014

Fuente Ovejuna



Este drama, narra la historia de los habitantes de Fuenteovejuna, un pueblo de Córdoba en la época de la reconquista, tras la llegada del Comendador, Fernando Gómez de Guzmán, un hombre que trata mal al pueblo y que abusa de su poder, haciéndoles la vida imposible a los vecinos de pueblo. El alcalde del pueblo no ayuda mucho a poner fin a las terribles acciones (robos, abusos, atropellos, crueldades…) del Comendador, así que, tras el secuestro de dos de los vecinos del pueblo, Laurencia y Frondoso, el pueblo decide tomarse la justicia por su mano y matar al Comendador en nombre de Fuenteovejuna y de los Reyes Católicos. En el juicio el pueblo queda absuelto porque no se podía nombrar a un culpable y porque el Comendador desobedecía las órdenes de los Reyes Católicos.


El libro en sí, siendo sincera, no me ha gustado mucho. Lo considero un libro un tanto aburrido y difícil de comprender para mi edad. A pesar de esto, debo decir que, por desgracia, representa muy bien el abuso de poder de los altos cargos de entonces y cómo lo sufrían los habitantes más humildes y lo fuerte que puede llegar a ser el poder del pueblo cuando se lucha por algo que quieren, y el honor de los habitantes de Fuenteovejuna. Este obra de teatro se podría tomar (desgraciadamente para la sociedad) de ejemplo y reflejo (no tan exagerado, obviamente) de los altos cargos políticos de hoy en día que abusan de su poder, para conseguir más dinero  y poder, perjudicando al pueblo, teniendo que tomar éste la justicia y llegar a un momento en el que saber decir que ya basta.

Cristina Molina Ruiz (2014)

martes, 22 de abril de 2014

Marianela



La historia comienza con la llegada de Teodoro Golfín, un prestigioso médico especialista en los ojos, que va a las minas de Socartes para visitar a su hermano, que es ingeniero en aquellas minas, y a intentar devolverle la vista a un chico ciego de nacimiento que también vive allí. Cuando Teodoro llega se encuentra un poco perdido, pero pronto ve a Pablo, que es el muchacho al que pretende curar, junto a Choto, su perro guía, y estos lo acompañan a su destino. Después de las presentaciones, Pablo le habla al médico de Nela, una chica que pasa los días con él haciéndoselos más entretenidos y sirviéndole también de guía. Solo Pablo habla maravillas de ella y la quiere de verdad, para todos los demás Nela es como un cero a la izquierda. Nela lleva una vida muy triste, su madre se suicidó y vive con los capataces de las minas que tratan mejor a los animales que a ella, es muy fea y no sirve para trabajar porque tiene problemas de salud que se lo impiden, y aun así, tiene un gran corazón que solo es apreciado por la única persona que no puede juzgarla por su físico, por Pablo. Teodoro también sabrá apreciar su bondad y le cogerá cariño desde el primer día, llegando a afirmar que es inteligente y que merece mucho más. Cepelín, un hijo de los capataces con el que se entiende muy bien Nela, le ofrecerá una nueva vida que la aleje de aquellas minas, pero ella, a pesar de todo lo malo que allí la rodea y de la gente que la hace sufrir con sus desprecios, luchará por conseguir sus sueños y por la ilusión con la que espera que las promesas que le hace Pablo se cumplan. Más tarde, todos los planes de estos personajes se verán truncados por la operación de Pablo y por la llegada de su prima Florentina.

A pesar de no ser un libro escrito recientemente, el autor nos muestra en esta historia los prejuicios de una sociedad en la que vivimos y que antepone la belleza física o el dinero a la bondad y el cariño. Me ha gustado mucho cómo ha sabido hacer frente a cada dura situación que se le presentaba a Marianela, y lo que más me ha gustado a la vez que me ha sorprendido ha sido la realidad con la que se cuentan los hechos, sin la necesidad de tener el libro un final que a la mayoría de lectores supongo que es el que les gustaría.

Patricia Díaz Clemente (2ºD Bach) (2014)

miércoles, 12 de marzo de 2014

Niebla



La historia da comienzo cuando Augusto va caminando por la calle y ve a una mujer de la que queda enamorado a primera vista. Ésta es Eugenia, a la que sigue hasta su casa. Se interesa por saber de ella y le pregunta a su criada Rosario, pero cuando la criada conoce las intenciones de Augusto, le avisa que será rechazado. Augusto aun así insiste y tras varias visitas le confiesa su amor a Eugenia, pero ésta lo rechaza porque está con Mauricio. Otro personaje que aparecerá en la historia será Víctor, amigo de Augusto, con el que se desahogará. A lo largo del tiempo y con la ayuda de los tíos de Eugenia y la criada (que no les cae en gracia Mauricio), Augusto consigue que Eugenia le corresponda, pero no de la manera que a él le hubiese gustado porque al final se descubren ciertos engaños por parte de ella. Muy triste, Augusto se plantea el suicidio, pero antes decide ir a visitar a Miguel de Unamuno a Salamanca porque sabe que ha escrito sobre ese tema. La visita de Augusto a Unamuno dará un gran giro a la historia y meterá tanto al lector como a los propios personajes en una gran confusión por no saber que es la realidad y que es la ficción.
El libro es ameno, y conforme vas avanzando te engancha más por tantas cosas inesperadas que ocurren. Algo muy sorprendente es ver como el propio Miguel de Unamuno se mete en la historia que escribe. Otra de las cosas que me ha llamado mucho la atención es cuando Orfeo, el perro de Augusto, a través de un monólogo interior, hace una crítica al ser humano que, desde luego, hace reflexionar. Sin duda alguna, un libro muy recomendable.

Patricia Díaz Clemente (2º Bach D) (2014)

miércoles, 24 de agosto de 2011

Persuasión



Me encanta Persuasión por su personaje principal, Anne, que para mí demuestra que las mujeres eran capaces de sobrellevar las situaciones más duras y por la ternura que desprende.
Siendo joven se enamoró del capitán Wentworth y éste de ella. Pero renunció a él por consejo de su amiga Lady Rusell, que pensaba que era demasiado joven.
Ocho años después vuelve a encontrarse con el capitán Wentworth y está nerviosa; pero no se deja llevar por sus temores y actúa de forma natural, aunque por dentro su corazón late a cien porque sus sentimientos hacia él no han cambiado.
Su indescriptible amor, su inteligencia y su bondad no hacen que pase desapercibida en una sociedad tan vanidosa y egoísta como la que la rodea, ya que despierta en todos una ternura especial.


María Consuelo Pardo Gil (1º ESO B. 2011)

lunes, 23 de mayo de 2011

Frankenstein



Víctor Frankenstein es un científico que profana tumbas con un objetivo: crear un hombre a partir de restos de cadáveres. El problema es que el experimento sale mal. Víctor selecciona de cada cadáver lo mejor para crear un hombre perfecto, pero el resultado es desastroso. Crea un horrendo engendro; enorme, alto, fuerte, con razonamiento propio... pero horrendo.

Éste huye, pero a partir de ahí la vida de Víctor Frankenstein empieza a volverse paranoica con el engendro.

Una noche, el engendro visita a Víctor. Éste le cuenta cómo ha sido su horrible vida desde que fue creado: salvó a un pueblo de un tornado y se lo agradecieron a golpes--- Éste le pide sólo una cosa: que cree una mujer para él, para que no se sienta tan solo. Víctor se niega y el engendro le promete hacer de su vida una pesadilla; y así hace: asesina a todos sus seres queridos, hasta el punto en el que Vídtor y el engendro se retan a un duelo en el que los dos caen.

Este libro me ha gustado, pero hace ver una cosa: muchas personas juzgan a la gente por su aspecto, en vez de por su persona. Esto haca que el engendro no se sienta aceptado y recurra a matar a la familia del doctor Víctor Frankenstein.


Cristina Molina Ruiz (2º ESO B. 2011)

jueves, 31 de marzo de 2011

Orgullo y prejuicio


Cuando comencé a leer la novela de Jane Austen, partía ya precisamente con ciertos prejuicios respecto a la obra: conocía vagamente su argumento, la época en la que fue creada y los temas que parecían dominar entre sus páginas. Por suerte, no había visto la película con lo que al adentrarme en el libro yo misma interpreté a mi voluntad cada personaje y expresión. Desde luego, las ideas que de él tenía con anterioridad no eran equivocadas, pero desconocía que la prosa de una mujer que vivió hace doscientos años pudiera parecer tan sumamente actual. Si bien es cierto que los temas que en ella se tratan, es decir, la búsqueda ansiosa de las mujeres de un marido de “bien” gracias al cual asegurarse una vida futura acomodada - poco importa su belleza física o sus rasgos de carácter - la hipocresía, las apariencias, los protocolos de la época… todos esos que nos parecen tan lejanos y anticuados puedan resultar por momentos faltos de interés, las habilidades de Austen como novelista hacen que la lectura sea amena y agradable, por momentos divertida pero siempre enriquecedora. He de admitir que al principio tardé en hacerme con los personajes, en conocernos, en apreciarlos, precisamente porque Austen se place deteniéndose y presentándonoslos poco a poco. Pero capítulo tras capítulo vamos conociendo a la ingeniosa Lizzy, a la encantadora Jane y al altivo Darcy, entre otros, y serán personajes que nos cautivarán con sus defectos y sus dificultades para ser sinceros con el mundo y consigo mismos y para abrirse paso en un entorno poco espontáneo y natural. La novela que asombrosamente Austen escribió recién cumplidos los veinte años es una novela que nos empapa de las costumbres de la sociedad inglesa rural de finales del XVIII y nos deja en nuestro interior un retrato de personalidades para todos los gustos. Incluye por supuesto personajes de los que sólo cabe mofarse, como la frívola madre de las hermanas Bennet o su hueco primo, el señor Collins, personajes entrañables como Jane, que por momentos roza la estupidez en su infinita ingenuidad, personajes a los que tomaremos manía, como la alocada e irresponsable Lydia o la pedante y muy repelente Lady Catherine de Bourgh, anclada de lleno en el centro de los estrictos principios morales que regían la sociedad de su época. Este personaje, junto al de Darcy y las hermanas de Bingley, permiten introducir en la novela cuestiones más serias, como las diferencias sociales y la distancia que había incluso entre gentes que se podían considerar todas iguales, “damas y caballeros”, de la misma clase social. Sin embargo, Darcy demuestra que era posible cruzar las barreras económicas y aristocráticas si de amor se trataba – siempre y cuando éstas no fueran muy importantes. Cuando, en su primera declaración a Lizzy, le muestra los inconvenientes que ese valiente acto le había ocasionado por culpa de los malos modales y la falta de distinción de su familia, Lizzy no soporta ni oír hablar de esto y le rechaza con ardor, sin duda porque ella misma sabe que es cierto y en algún modo se avergüenza de su propia familia que tan a menudo roza la vulgaridad. Jane Austen consigue pintar con notable sencillez un ambiente rural y clasista cuya mayor preocupación eran las apariencias. Me pregunto hasta qué punto estas apariencias dificultaban por aquel entonces las relaciones humanas. Es decir, cada movimiento, cada frase pronunciada, cada paso en falso estaba tan protocolizado, tan preestablecido, y era tan universalmente conocido por todos qué se podía y qué no se podía hacer, que sin duda sería complicado para cualquiera adivinar cuales eran realmente las intenciones que había detrás de toda aquella tapadera asfixiante. Y es que toda la novela no relata sino un hecho que aparentemente es muy simple: el florecimiento de un amor, el enamoramiento de dos jóvenes inquietos y despiertos. Pero este paso que han de dar juntos se demora tantísimo por culpa del orgullo de clase de uno y de la falta de valor y de sinceridad de la otra. También hay que considerar que probablemente les fuera difícil conocer los verdaderos sentimientos del otro y tuvieran que desmenuzar cada comentario intentando interpretar el significado oculto detrás. A esto me refiero cuando digo que las convenciones y los valores de la época fueran obstáculos al libre despertar de un amor natural y correspondido. Hay una historia en concreto que me ha interesado por su dureza, y es la de la vecina y amiga íntima de Elizabeth, Charlotte Lucas. Por su dureza y por su realidad, puesto que seguramente su caso sería el de muchas otras jóvenes de Inglaterra en el XVIII. Charlotte se casa con un párroco estúpido y jactancioso, poco atractivo en cualquiera de sus aspectos, por temor a encontrarse soltera y viviendo en casa de sus padres cuando alcanzara la madurez. A sus 27 años, edad que actualmente nos parece incluso demasiado temprano para contraer matrimonio, Charlotte opina que se le hace tarde y que sus oportunidades de encontrar un buen marido son cada vez menores. Por eso sacrifica su felicidad y sus intereses personales con tal de escapar de su hogar, independizarse y hacerse una mujer como la que todos esperaban que fuera. Este sometimiento a las expectativas que la alta sociedad imponía a cada mujer es tan cruel y triste que incluso Charlotte le pide piedad y comprensión a su amiga Lizzy cuando le anuncia que está prometida con su primo. Lizzy comprende que no todas las mujeres tenían margen de elección y se compadece de su amiga, sin dote y poco agraciada físicamente, que tiene que conformarse con un hombre que no satisfará sus deseos en ningún caso, aunque le de acceso a una propiedad de considerables dimensiones. Esta no es la posición de Jane y Elizabeth Bennet, quienes por su despampanante atractivo, su juventud, su inteligencia, distinción y su modesta dote, podían permitirse el lujo de rechazar pretendientes. La obsesión de su madre por conseguir casarlas a ellas y a sus hermanas será un obstáculo que vencer antes de poder negarse a unir sus vidas a ciertos hombres, pero lo harán, sobre todo Elizabeth, quien no considera a ningún hombre lo suficientemente bueno para ella. Jane, más enamoradiza y menos exigente, caerá rendida a los pies del encantador Bingley, y a pesar de su inteligencia y su elegancia, no cuestionará jamás lo que se espera de ella como una buena esposa e hija. La crítica de Austen no va sin embargo demasiado lejos, pues aunque Lizzy sea rebelde y tenga inquietudes más profundas que las de su familia, al final acaba igualmente casada con un hombre rico – el más rico de los tres yernos, además – y adoptando el modo de vida que toda mujer respetable y decente debía llevar. “Orgullo y prejuicio” es una novela de unos personajes tremendamente bien perfilados, con pocos trazos pero muy distintos unos de otros, que tienen intereses, miedos y esperanzas también distintos. Austen emplea un léxico rico pero no embarullado, un lenguaje sencillo pero poético, irónico y cómico que nos hace sonreír en algunos instantes (por ejemplo, cuando el señor Bennet bromea con que está dispuesto a recibir pretendientes para sus hijas restantes) y emocionarnos en otros (ambas declaraciones de amor de Darcy, conversaciones entre Jane y Lizzy, la fuga de Lydia…). Una de las escenas que más me enganchó fue la de la visita de Lady Catherine para amenazar a Lizzy y obligarla a admitir que rechazaría cualquier pedida de mano proveniente de Darcy. Las respuestas e intervenciones de la joven Bennet son tan lúcidas, ingeniosas y tajantes aún cuando se encuentra frente a una mujer que le supera en edad, en posición social, en fortuna y a la que por lo tanto le debe respeto y sumisión, que fue todo un deleite para mí, pues el odio que había acumulado hacia el personaje de Lady Catherine fue todo de golpe desahogado. Otro elemento de la obra que me llamó bastante la atención fue la ociosidad de los personajes, y en general, de las clases altas de Inglaterra en aquella época. Viven unas vidas banales, dedicadas a visitar a tal o cual vecino y a asistir a bailes y cenas para el simple entretenimiento. Me parecieron vidas vacías, sin ningún sentido, sin ningún objetivo que perseguir, ni siquiera el de mejorar en la vida laboral, de la que carecen. Esto también demuestra que si por un lado de la moneda la sociedad vivía sin preocupaciones de ningún tipo, por otro lado probablemente la miseria y la enfermedad de las clases bajas fueran enormes para compensar esos lujos. El final de la obra, tras tantos altibajos, preocupaciones y contrariedades, es un final feliz que satisface al lector que tanto ha deseado la felicidad de la inconformista heroína. Y es que después de trescientas páginas compartiendo su transformación, su pérdida de prejuicios y el desmantelamiento de sus primeras impresiones, su enamoramiento y su frustración, yo por lo menos sólo deseaba que Darcy se atreviera por fin a declararse y que ambos protagonistas alcanzaran su tan anhelada unión.

viernes, 18 de marzo de 2011

El pato salvaje


La obra de teatro El pato salvaje se divide en cinco actos. En ellos se cuenta la historia de la familia Ekdal, en la cual se van revelando sucesos que ocurrieron hace mucho tiempo. Tras la aparición de Gregorio, un personaje que intenta llegar a la verdad de lo que ocurrió hace dieciséis años, se producen una serie de hechos que finalmente provocan la muerte de la hija de su amigo Hialmar.
El testimonio de Gregorio sobre la fidelidad de Gina, mujer de Hialmar, es el desencadenante de toda la tragedia. Cada uno de los miembros de la familia vive la situación en un mundo imaginario, en el que el padre se cree un gran inventor, el abuelo añora sus pasadas glorias militares y la pequeña Eduvigis se refugia en el desván, donde un pato salvaje vive en un bosque imaginario.
El pato salvaje, de Ibsen, nos describe un drama. La obra se basa en la historia de vivir la vida bajo una gran mentira, pero cuando la mentira se trata de resolver, para así por fin llegar a ser felices, es cuando se desata una auténtica tragedia. Es una obra que te hace reflexionar, si verdaderamente quieres saber la verdad o no y seguir de esta forma en la ignorancia.
En resumen la obra me ha gustado y ha sido muy rápida de leer.


Noemí García Romero (2º Bach E. 2011)

viernes, 4 de marzo de 2011

Madame Bovary


Charles Bovary, médico, se casa con Emma, una chica de quince años que vive con su padre.
Emma pasará a llamarse madame Bovary.
Madame Bovary tiene unas ideas sobre el matrimonio que no llegarán a corresponderse con la relación que tiene con Charles. Madame Bovary queda embarazada y da luz a una niña a la que llama Berthe, pero Emma nunca ejercerá de madre.
El aburrimiento de Emma y su disgusto por la falta de atención de su marido, le llevarán a empezar a coquetear con Rodolphe Boulanger y con Léon Dupuis. Estos dos hombres se convierten en amantes de Emma.
Finalmente Emma queda metida en un montón de deudas y con ellas mete a su familia en una grave situación. Este gran problema económico la lleva al abandono de sus amantes y a la decisión de acabar con su vida.
Después de su muerte, la situación de Charles es crítica. Embargan su casa y todos sus bienes ya que no puede hacerse cargo de toda la deuda contraída.
Charles termina enterándose de los encuentros que tenía su mujer con Léon y Rodolphe, pero aun así no ve motivo suficiente para dejar de amar a su fallecida mujer. El señor Bovary, finalmente acaba muriendo también, dejando a la pequeña Berthe huérfana.
En mi opinión, es una buena obra del siglo XIX. En ella se describe la Francia de aquella época.
Es una obra romántica que muestra en cierta manera cómo se comporta el ser humano en un mundo que no le gusta, aunque quizás sea un poco exagerado, pues la protagonista no solo sufre ella, sino que también hace sufrir a la gente que la rodea.


Noemí García Romero (2º Bach E. 2011)

viernes, 29 de octubre de 2010

La casa de Bernarda Alba


Bernarda con 60 años pierde a su segundo marido y queda al cuidado de sus cinco hijas, quien con autoritarismo las somete a una disciplina dura (8 años de luto), basándose en su posición de “cabeza de la familia”. En la casa también se encuentran la madre de Bernarda, María Josefa (una anciana aparentemente loca que expresa su deseo de amor y libertad), Poncia (como primera criada y amiga de Bernarda) y otra segunda criada.
Pero el luto es roto por la llegada de Pepe el Romano quien pretende a la mayor de ellas, Angustias (por su dinero). Adela, la menor, siente un deseo de libertad que es más fuerte que la autoridad de su madre. Pepe el Romano desencadena las pasiones de estas mujeres, que desean casarse para liberarse de la autoridad de Bernarda y ser felices. Finalmente, Adela consigue mantener relaciones sexuales con Pepe el Romano, pero por miedo a quedarse embarazada de él o por quedarse encerrada como su abuela por expresar sus pensamientos, decide suicidarse.
Esta obra esta dividida en tres actos. En ella se representan las falsas apariencias, el odio y la envidia.
En mi opinión es una muy buena obra de teatro, de las mejores que he leído, es fácil de entender y entretenida, basada en la cruda realidad de antes. Se hace, eso sí, muy corta.


Noemí García Romero (2º Bachillerato. 2010)