Nicolás era un chico que ayudaba a su padre con su agencia de detectives. Un día se le presentó el caso de los ladrones de “perros pintores”: un hombre les pidió que encontraran a su perro desaparecido. Al empezar la investigación, Nicolás descubrió que el hombre tenía una hija guapísima que estaba muy interesada en recuperar al perro, ya que era muy importante para ella. Al mismo tiempo que intentaba descubrir el paradero del perro, intentaba que ella se fijara en él dándole el consuelo que necesitaba. Finalmente Nicolás, ayudado por su amigo Oráculo y el padre de éste, tendió una trampa a los supuestos secuestradores.
¿Funcionó? Un poco de intriga nunca viene mal.Desde mi punto de vista es un libro intrigante con una doble historia, pero un poco sencillo. Aun así, es entretenido.
¿Funcionó? Un poco de intriga nunca viene mal.Desde mi punto de vista es un libro intrigante con una doble historia, pero un poco sencillo. Aun así, es entretenido.
María Sánchez Nortes (2º ESO B. 2011)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.