miércoles, 29 de diciembre de 2010

El armario de Abdou


En una de las historias de este libro vemos a un hombre que yendo al trabajo se encuentra en la basura un armario en perfecto estado y corre en busca de alguien que le ayude a llevárselo a su casa; pero un hombre calvo y bajito se había adelantado y se llevó el armario en la baca de su coche. Abdou quería el armario para su hija: quería regalárselo para su cumpleaños, que era al día siguiente; pero no pudo.

En otra de las historias, un hombre estaba jubilado. Había sido futbolista y taxista. De vez en cuando se vestía con el equipamiento de su equipo, ensayaba goles, soñaba que gracias a él su equipo ganaba. Tras varios años de retiro lo llamaron para que volviera, pero él pensaba que era una broma y colgó. Siguieron insistiendo, cogió el teléfono y comprobó que era verdad. El día anterior al viaje pensó que tendría que subir a un avión y le entró pánico. El viaje lo hizo dormido y la azafata lo despertó al llegar. Un coche lo llevó al estadio y, aunque iba nervioso, cuando entró en el césped disfrutó del momento hasta el final del partido y sintió que había ganado.

Este libro está bastante bien y muy interesante. Te dan ganas de seguir hasta que tengas la vista cansada. Es muy bonito. Me gusta. Lo recomiendo para todos los lectores.


Lidia Romero Alcolea (1º ESO B. 2010)

martes, 28 de diciembre de 2010

Elliot Tomclyde


Elliot, de 12 años, vive en Quebec, una ciudad del norte donde cada año se celebra una fiesta con un desfile de carrozas y la construcción de un muñeco de nieve, Bonhomme. Este año es su quincuagésimo quinto aniversario; y la fiesta, especial.
Un día, Elliot y sus amigos estaban jugando a una batalla de bolas de nieve cuando aparecieron Gorkky y sus amigos, unos matones. Se metieron con ellos, pero ocurrió algo asombroso: cuando Gorkky iba a hacer una enorme bola de nieve se le quedaron las manos atrapadas en la tierra, quedando así humillado. Este hecho, Elliot lo tomó como signo de buena suerte.
Los padres de Elliot lo inscriben en un campamento de supervivencia para después del curso y él espera impaciente su llegada, hasta que llegó el día.
Tras llegar al campamento, quiso explorar los alrededores, un bosque en cuyo centro había una enorme secuoya. Entonces creyó ver algo o a alguien; y echó a correr, volviendo al punto de partida.
Después de la cena, Elliot volvió a ir al bosque y vio a una chica que estaba siendo atacada por unos monstruitos. Los ahuyentó y comenzó a hablar con la chica, que era de lo más rara; hasta que de repente esta se esfumó.
Elliot volvió al campamento y durmió como pudo.
A la mañana siguiente, saludó a uno de sus compañeros de habitación mientras se vestía. No le contestó.
Tras una larga caminata hasta un lago, pudo comprobar que nadie le hablaba, era como si no estuviese… Encima de una roca, en el lago, una figura con una túnica estaba hablando con él. Era Goryn, y le explicó que el hecho de ver a esa chica la noche anterior era muy raro. Le dijo todo lo relacionado con la magia elemental, las ciudades y los magos y criaturas mágicas, a lo que Elliot respondió quedándose perplejo.
Tenía que ir a ver al Consejo, para decidir que hace con él, pues el contacto con el mundo mágico era extraño.
Goryn le llevó a una ciudad llamada Hiddenwood, donde el Consejo decidió qué hacer con él. Dejaron que volviera al campamento, pero a cambio Goryn lo vigilaría hasta que pudiese hacer la prueba para determinar a qué elemento pertenecía.
Así transcurrió el campamento, hasta que una mañana Goryn no apareció.
Llegó la hora de partida para Quebec y Goryn no regresaba. ¿Había sido todo imaginación de Elliot?
Un día, en la casa de los Tomclyde, Goryn apareció por el espejo de la habitación de Elliot junto con un miembro del consejo. Elliot tenía que irse a cursar en una escuela de magia. Después de explicárselo a sus padres (difícil tarea) Elliot se marchó.
Este nuevo año estará cargado de sorpresas para él.


Chulísimo, aunque corto, estoy deseando tener en mis manos la segunda entrega. Para ser de un tema ya muy quemado (la magia) es bastante original. Creo que le gustará a cualquier lector con ganas de divertirse y al que le guste la fantasía.


Álvaro Parra López (2º ESO B. 2010)

lunes, 27 de diciembre de 2010

Crypta


Esta historia comienza hace miles y miles de años atrás, cuando un insignificante djinn del desierto llamado Eblus sueña con convertirse en un demonio del más alto rango. Y así fue, llegó bastante alto. Más de lo que ningún djinn podía llegar a ser.

Un día el diablo Eblus hizo un trato con una mortal de la familia Albás y ella se burló de él, por lo que prometió vengarse de ella en las futuras generaciones de familias Albás. Fue entonces cuando se dio cuenta de que había algo especial que la caracterizaba, como la belleza o la codicia; y pudo comprobar que todas esas cualidades se reunían en una sola muchacha llamada Natalia.

Eblus, fascinado, la adiestró y le enseñó el arte de la oscuridad cuando aún era pequeña. Y una vez que se convirtió en mujer se enamoró de ella.

Para los diablos, el amor era un sentimiento repugnante y asqueroso, ya que les hacía más blandos. Fue entonces cuando le ocurrió algo peor aún: su peor enemigo intentó matar a Natalia, y cuando él se lo prohibió se vio obligado a renunciar a sus poderes, por los que tanto y tan duro había trabajado.

Es así como Eblus tendrá que conquistar a Natalia, su amada, y a la vez recuperar su antigua posición infernal.

Al leer este libro me ha fascinado tanto que cuando paraba de leer se me hacía raro volver a la realidad. Y además tiene un final que no me esperaba en absoluto. Os lo recomiendo a todos los lectores si os gustan los libros de misterio, fantasía y, sobre todo, amor no correspondido.


María Consuelo Pardo Gil (1º ESO B. 2010)

domingo, 26 de diciembre de 2010

Versos vegetales


Este libro se compone de poesías, cuentos, canciones, posadas, recetas, consejos, juegos y adivinanzas. Algunos de ellos son muy divertidos. El texto que más me gusta de todos es esta canción:

NANA DEL PINO PICEA
Ea, ea,
la danza de la picea.
Verde en invierno
y en primavera.
Verde y esbelta,
ea, ea.
Pájaros duermen,
pájaros sueñan,
pájaros verdes,
pájaros menta...
Rumor de trinos
en la picea.
Ea, ea.

Hay también otras muchas que están bien, como la adivinanza de la página 67, que me parece estupenda.


Lidia Romero Alcolea (1º ESO B. 2010)

Lola Torbellino


Lola Torbellino es una niña de ocho años y vive en Madrid con su madre, su padre, su hermano Felipín, su abuelo Toño y su perra Petra. Lola realiza muchas travesuras y se las cuenta en un diario a su hada madrina (que no sabe muy bien si existe, pero en su cabeza se la imagina perfectamente).

Una vez, su madre se estaba poniendo muy gordita y con cambios de humor: estaba embarazada. Lola no se lo tomó muy bien porque no quería compartir a su madre.

Pasó el tiempo y llegó el verano; y con él, el calor. Lola quería ir de vacaciones pero su madre, con la barriga, no podía. Así que Lola se fue al pueblo de los padres de su mejor amiga. Pasó una semana y Lola tenía que ir al hospital. Allí vio a su hermana Carmencita. Era preciosa. Al final, se fueron los seis a la playa.

A mí el libro me ha gustado mucho, porque las travesuras de Lola son muy divertidas. El único problema es que a veces la obra me parece un poco infantil. Creo que le gustaría más a lectores de un par de años menos.


Mª Pilar Bernal Mondéjar (1º ESO C. 2010)

sábado, 25 de diciembre de 2010

Alas negras


No fue fácil escapar de Gorlian, pero Ahriel (con la ayuda de unos amigos y otros no tan amigos) lo consiguió, encerrando a su vuelta en el infierno a Marla. En su huida de la prisión dejó algo atrás. Algo que está dispuesta a todo por recuperar. Estuvo meses buscando Gorlian pero no logró encontrarlo, así que se encamina a la preciosa Aleian, ciudad de los ángeles, con el fin de conseguir la aprobación del consejo angélico para entrar al infierno y preguntar a su protegida dónde encontrar esa bola de cristal a la que llaman Gorlian, aunque está dispuesta a entrar tanto con el consentimiento del consejo como sin él y Ubanaziel lo sabe perfectamente.
Así que viendo que a los miembros del consejo no les agrada la idea, se ofrece como voluntario para acompañar a Ahriel a recuperar eso tan valioso que busca y por lo que pretende remover tierra y mar, cielo e infierno si hace falta para encontrarlo, aunque éste ni siquiera sabe de lo que se trata.
Así que Ahriel y Ubanaziel emprenden un viaje al infierno en el que conocerán tanto a diablillos traviesos como a enormes demonios contra con los que tendrán que luchar y contra los que vendrá muy bien la experiencia de Ubanaziel y no tan bien la de Ahriel, un ángel que ha sufrido mucho.
La verdad es que me parece un libro muy entretenido. No es nada complicado de entender y se lee muy rápido. Como veis es de género fantástico y me parece incluso más interesante que la primera parte, además de que es más largo. Una de las cosas que más me han gustado en este libro han sido los personajes tan peculiares que aparecen, porque no se parecen en nada a ninguno de otros libros que me haya podido leer.


Miriam Tortajada Gomariz (3º ESO B. 2010)

Calvina


Lucrecio es un hombre que se dedica a robar. Sí, es un ladrón. Una noche entra a robar a una casa y se encuentra con una niña (o niño) llamada/o Calvina/o, que le pide que se quede a cuidar de ella como si fuese su padre y asegura, que si es así, ella no dirá nada a la policía. Por miedo, Lucrecio acepta la invitación y es llevado por Calvina/o hasta un manicomio, en el que todos piensan que son personajes de cuentos.
Ve a una mujer congelada en un frigorífico y más tarde andando tranquilamente por la casa... y un montón de cosas más que harán que Lucrecio no salga de su asombro y llegue a pensar que está loco. Pero en el mundo de Calvina todo tiene una explicación y no todo es lo que parece ser.

El libro no está mal. Es corto y tiene la letra grande, por lo que no se tarda mucho en leerlo. Me ha gustado porque es muy original y porque no es una historia corriente, sino extraña y bonita a la vez. Recomiendo este libro a las personas que quieran leer otro tipo de libros, algo diferente.


Laura García Cobarro (2º ESO A. 2010)