lunes, 15 de junio de 2020

Un mundo feliz




Un mundo feliz es una novela utópica, pero su objetivo es criticar al pensamiento social de 1930, que todavía está presente en la actualidad.
La historia de este libro se desarrolla en un mundo futurista y tecnológico en el que todo es perfecto (novela utópica). En esta sociedad, las personas se crean artificialmente, en fábricas, juntando productos químicos, donde la élite los crea a su antojo. La economía se divide en 5 castas: Alfa (siendo los más inteligentes y bellos), Beta, Gamma, Delta y Epsilon (siendo los más tontos y feos). Como todos pertenecen a todos (una de las filosofías de este mundo), todo individuo es feliz. Nunca están solos, pertenecen a una casta con sus propios derechos y deberes... Además, de pequeños usan la hipnopedia, una forma de hacer que, mediante repeticiones de la misma frase una y otra vez, se les quede grabado en la mente y sigan su estilo de vida como se les ha dicho. 
Bernard Marx y Lenine son los protagonistas. Bernard pertenece a los Alfa - plus, pero al ser más bajo de lo que tiene que ser, es marginado por la sociedad. Eso le hace pensar por sí mismo y evitar tomar soma (la droga que hace que la gente esté feliz, se olvide de sus propios pensamientos e ideas y de la situación en general). Lenine quiere ser la pareja de Bernard aunque este sea un poco raro, al fin y al cabo es un Alfa y encima es guapo. Los dos se van a Nuevo México, donde está la reserva de los salvajes. Allí, se pueden visitar las aldeas para hacer turismo y ver cómo viven estas personas. En este sitio, Bernard y Lenine conocen a Linda y John, su hijo, pero estos eran diferentes. Resulta que vivían en la civilización, pero después de un accidente se quedaron allí atrapados, sin poder salir por las reglas de la tribu. Bernard los saca de allí y John, una persona con pensamientos parecidos a los de Bernard, siembra el "caos" por la civilización. A John se le manda a un sitio apartado de la sociedad, donde la gente le trata como a un juguete. Después de un tiempo, John se suicida, pero no por sus malos tratos, sino por el nuevo mundo y su forma de pensar. El mundo que hace que las personas no sean únicas, sino parte de una sociedad en la que a nadie le importas. Un mundo en el que la vida y la muerte equivale a 0. Un mundo en el que tú no vales nada, pero aun así, lo eres todo para que la sociedad funcione como quiere el estado que funcione. Un mundo, en el que eres una marioneta sin alma ni sentido propio.
Un mundo feliz te hace pensar mucho y, además, tiene muchas referencias con la vida real. Al fin y al cabo, el autor tiene parte de razón y en ciertos momentos te recuerda a situaciones actuales.

David Stefan Scarlet (2º ESO A) (2020)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.